Las lágrimas fluyeron aun más rápido cuando aquel señor de capa y gorro de mafioso se acercó a aquel niño pequeño de ojos castaños y puso la mano sobre la cabeza diciendo: "su corazón dejó de latir. Ya no existe".
Mientras se siga latiendo en el corazón de alguien, se existe, y ese latido ya no espera nada, no es egoista. Tan sólo hace que se siga existiendo. Es la prueba de amor
Mientras se siga latiendo en el corazón de alguien, se existe, y ese latido ya no espera nada, no es egoista. Tan sólo hace que se siga existiendo. Es la prueba de amor
ResponderEliminarEstá bueno! =D
ResponderEliminar